Hasta que se generalicen alternativas como las pruebas en tejido crecido en laboratorio, ratones transgénicos sin nocicepción (sentido del dolor) u otros métodos, es difícil mantener el ritmo de innovación en todo tipo de avances, sobre todo cosméticos sin dejar atrás el uso de animales, a no ser que los consumistas estén de acuerdo con la posibilidad de morir tras comprar el nuevo labial que no se probó en nada, o esperar 5 años sin nuevo producto.
Sea el primero en responder a esta respuesta .
Únase a conversaciones más populares.